5 sept 2012

La Salud Mental de la Caba en crisis



 


  MESA PERMANENTE INTERSECTORIAL DE SALUD MENTAL-


- DECLARACIÓN -

                                Como miembro integrante de la Mesa  Permanete Intersectorial de salud mental adhiero a esta declaración que comparto con todos ustedes.                                                                                              


A medida que avanza la gestión del actual gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se profundiza a un nivel de suma gravedad, el deterioro del conjunto de los efectores de atención de la salud y salud mental del subsector estatal. A este deterioro que en líneas generales, involucra el cierre de servicios, la falta de insumos, la carencia de mantenimiento de la infraestructura y la oposición al nombramiento de profesionales y trabajadores para áreas críticas de la atención,  se suma el incumplimiento de los lineamientos establecidos por la Constitución de la Ciudad, la Ley Básica de Salud N°153 y la Ley de Salud Mental N°448.

Llamativamente, al accionar de los funcionarios del gobierno avasallando la salud pública, se suma el silencio cómplice de la dirigencia de la Asociación de Médicos Municipales (AMM),  que sugestivamente  ha suscripto junto a otras entidades gremiales, un acuerdo con el gobierno, para que este pueda avanzar sin oposiciones en la construcción del “Nuevo Distrito Gubernamental” (antes “Centro Cívico) en terrenos del Hospital Borda - que dicho sea de paso, continúa con graves falencias, como es la que indignamente sufren los pacientes internados por la falta de suministro de gas desde hace más de un año -.

Hoy cabe considerar a este “entendimiento” como un virtual cogobierno del área de Salud, que queda explícito en el  dominio e injerencia que la AMM ejerce, desde el momento que logra imponer a gran parte  de los funcionarios de gobierno. Como contrapartida, observamos el desconocimiento  e incumplimiento de las leyes, no haciéndose cargo así, de la necesaria transformación de un modelo anacrónico que consecuentemente termina afectando a la población que se asiste.

Particularmente en Salud Mental y en los últimos años, resulta lamentable la seguidilla de funcionarios impuestos en el cargo de Director General de Salud Mental (máxima instancia jerárquica del área), en cuanto que todos dedicaron su gestión al objetivo premeditado por un cierto sector minoritario de la medicina y  pretendidamente “hegemónico”: no dejar que se implementen las transformaciones que desde los criterios de la interdisciplina e intersectorialidad, tanto la Ley 448 de la Ciudad como la Ley Nacional de Salud Mental N°26.657 establecen muy claramente.
En el presente, la funcionaria a cargo, reitera y magnifica la situación, al no funcionalizar los efectores y dispositivos previstos por la ley. En cambio, sí se dedica a desarticular los existentes, tal como está aconteciendo con el Programa de Asistencia Comunitaria para niñas, niños y adolescentes con trastornos mentales severos (PAC). También la funcionaria,  y a nueve meses de su gestión,  demuestra su indiferencia por las leyes vigentes, ya que a la fecha no ha convocado a ninguna reunión del Consejo General de Salud Mental - instancia de asesoramiento para la autoridad del área e integrado por representantes de: efectores del sector estatal, asociaciones gremiales y profesionales, instituciones de formación, la Legislatura y la Justicia -.
Más allá de toda legalidad, resulta paradójico que tratándose de la Salud Mental, alguien se niegue a escuchar.

A doce años de la sanción de la Ley 448, cabe preguntarse: ¿cómo resulta posible que se designen funcionarios, que sin pudor y públicamente, se manifiestan contrarios a los lineamientos establecidos por  las normas legales que rigen en nuestro distrito y el país, y que están obligados a cumplir ?.

Por último, hacer mención de otra repudiable consecuencia de este anudamiento gubernamental-corporativo, y que refiere al total desconocimiento que se hace respecto del llamado a concursos abiertos para cubrir cargos de conducción en los efectores públicos estatales, tal como lo establece la Ley Básica de Salud N°153. Muy a pesar de que esta ley está vigente desde el año 1999, persiste la variable histórica de nombrar a los directores de los hospitales mediante metodologías que sin dudas, contradicen los lineamientos legales.
También con este accionar arbitrario, direccionado desde la AMM y el gobierno, en el marco de la Salud Mental ha posibilitado el desplazamiento de  algunos directores de hospitales, por el sólo hecho de trabajar  en concordancia con los postulados de la leyes de salud mental.
Esta reprobable actitud corporativa, que bajo supuesta defensa de intereses, en realidad encubren el sostenimiento de retrógrados privilegios, en el presente se desplazará hacia otros efectores de salud mental, como el caso del Hospital Carolina Tobar García, que por jubilación de su actual director, habrá de iniciarse un proceso de reemplazo y en el cual debe asegurarse y respetarse el derecho de todos los profesionales de las diferentes disciplinas, a presentarse a un concurso abierto, tal como lo establecen las leyes vigentes.

La Mesa Permanente Intersectorial de Salud Mental, acorde a sus principios, denuncia este estado de situación y exige a las autoridades del gobierno de la Ciudad, a cumplir sin límites con todos los lineamientos legales vigentes, que no son otra cosa que la transformación y democratización de un sistema de salud y salud mental digno y eficaz, tanto para la población que se asiste, como para los profesionales y trabajadores que en él desarrollan su labor.

                                           
                                                                      
                                                                      Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 4 de julio de 201